16/1/08




-Adelante, cariño-, la sorprendió la sueve voz de su anfitriona-. No tienes nada que temer.

El cenador estaba iluminado ténuemente por dos faroles y unas velas bajas ordenadas decorativamente en el centro de la mesa vestida de blanco. Él ya se encontraba allí, llevaba una americana negra sobre una camisa de un tono rojo oscuro. La miraba de aquella forma a la vez sutil y descarada que la hacía sentirse incómoda en su presencia, como si intentase observarla y no pudiese disimular que lo hacía.
-Víctor-, saludó ella primero, anclada en su vestido de rebajas.
Él simplemente alzó su copa y le sonrió enigmáticamente.
-Siéntate, querida-, le aconsejó su anfitriona-. Pronto servirán la cena y tenemos mucho de lo que hablar.
Obedeció tórpemente y se acomodó en una silla de corte barroco que habría desentonado en cualquier otro cenador, pero que allí parecía ocupar el sitio justo. Recordó que había sido invitada para hablar de sus cuadros y se maldijo mentalmente por no haber llevado el dosier actualizado con sus diseños. Sentía que Victor la seguía mirando por encima de su copa y se removió incómoda en el asiento. Los tacones no le daban ninguna seguridad ahora que se encontraba sentada. El silencio comenzaba a hacerse incómodo cuando una señora mayor vestida de azul interrumpió la escena cargando con un plato cargado de comida. Después de titubear, la mujer dejó el plato en la mesa y se retiró.
-Voy a comentarle unas cosas sobre el postre a María-, comentó por fin la anfitriona al tiempo que se levantaba y salía de la habitación siguiendo a la criada.
Su corazón comenzó a latir enloquecido y una sonrisa pícara apareció en el rostro de Víctor que dejó la copa en la mesa.
-Puedes empezar a comer-, le sugirió acercándole el plato.
-Prefiero esperar a que todos estemos servidos-.Murmuró mirando el vino rojo y transparente en la copa amplia.
-No te preocupes-, sonrió Víctor mientras agarraba un tenedor y pinchaba un poco de carne del plato-. Sofie regresará pronto y yo voy a reservarme para el postre-. Susurró acercándose a su oído.


1 comentario:

Luar dijo...

Estoy curioso...que será el postre??? Soy muy guloso...