7/9/11

Soñé que llegabas a casa y te imaginaba portando una maleta de cuero vieja. Te imaginaba porque no podía abrir los ojos y recorría nuestros dominios a tientas, con la seguridad del que se sabe en su territorio. La luz o el miedo me impedía abrir los ojos y tu voz llegaba cansada a mis manos tímidas mientras dejaba el aire recorrer las habitaciones oscuras en nuestra casa sobre el tejado. De pronto nos chocábamos y yo, que no te había intuido, me sobresaltaba abriendo los ojos sin pensarlo. Me mirabas dulce y agotado, me apoyé en ti, decidida a no cerrar mis párpados de nuevo.

3 comentarios:

DANI dijo...

Me encanta lo de la maleta ;)))

Besazos enormes

Juan dijo...

No los cierres!

Vagamundo dijo...

Un sueño prometedor con unos bonitos puntos suspensivos invisibles al final...