24/3/11

cobarde 
descalza tengo miedo
del  hombre valiente
que a veces eres. 

no quiero tener que acostumbrarme a ti
para luego pelearme con tu ausencia
y buscar mi alma entre las ruinas llamadas nosotros.

no quiero aprender tus verdaderos nombres
y luego aullarlos a la luna cuando te marches,
que me sepas, que me descubras,
que ande desnuda por el mundo sin tu mano y tu sonrisa.

no quiero construirnos, salvarme en ti,
alimentar mi fe junto a tu boca,
no quiero creer en la felicidad y que entonces,
antes que tarde, vuelva a ser la casa sola,
el frío, las costillas oxidadas, la clavícula sorda
porque no estás.

8 comentarios:

Elendilae dijo...

¿Y qué propones? ¿Ser infeliz siempre por tener miedo a que ocurra eso, que tal vez no ocurra?

Siempre hay miedo, pero hay que arriesgarse, aunque luego salga todo al revés.. pero merece la pena...

Un besito

Anónimo dijo...

Te entiendo, entiendo el miedo y, a la vez, entiendo no perderse el riesgo. Lo que no entiendo es qué se hace si la casa se queda sola y nadie llena el vacío

FacuZ dijo...

que ser cobarde no valga la pena...

un beso grande,
Facu.

chose dijo...

Me está pasando algo así en este momento.

Exactamente eso.

Un abrazo.

Lady Cherry dijo...

ME ENCANTA SE QUEDA CORTO...
ES PERFECTO.

UN BESO!!!

Salomé dijo...

La soledad a trozos es de los monstruos más horribles del mundo.

MâKtü[b] dijo...

Los más valientes son los primeros que tienen miedos ^^

DANI dijo...

Tengo un corazón a prueba de barrancos, así que....a mi plin :)

Besos voladores