20/4/09


Te imagino, sentado en algún lugar absurdo: un coche, una silla incómoda a la entrada de un banco, un restaurante de comida rápida atestado de chiquillos bronceados. Llevas prendido del silencio cierta ausencia que no sé comprender y te sorprende que nadie sea capaz de mirar el mundo como tú lo miras. Es hermoso verte en ese escenario ejerciendo de visionario modernista, poeta. Te imagino conversando sobre la última película que has visto, sólo tú, de la que sacaste algún complejo sentimiento humando como acostumbras. Te conquistó un diálogo, un fotograma concreto, la actriz que parecía pájaro observando las ventanas. Llevas la vieja americana de intelectual incomprendido que tanto me gustaba, porque cuando encerraba los brazos alrededor de tu espalda, se levantaba furiosa y te daba frío y yo reía y te quejabas, como siempre. Te imagino sin afeitar con los ojos atados a lo que ninguno vemos. Has vuelto a fumar. Te has cortado el pelo. Llevas todavía en la boca el rumor de un beso viejo, parecido a mí.

2 comentarios:

Luar dijo...

...memórias...

Juan dijo...

Los recuerdos nos asaltan debes asi de improviso ... yo tambien la imagino sentada en algún lugar absurdo. ¿En donde estará? :(