aires de cambio
Como cuando el Almirante Boom anunciaba aires de cambio desde su tejado londinésy los relojes temblaban por una nueva bomba en el salón,
como cuando el suelo se movía inevitable bajo mis pies
y el tren aparecía llevándoselo todo en una estación vacía hacía demasiado tiempo,
como si las sirenas de los barcos en la niebla del Cantábrico volviesen a sonar en el fondo de mi pecho
y los molinos de viento lanzasen sus luces nocturnas en telegramas indescifrables,
como si tú y yo siguiésemos en esa carretera nocturna pensando en nuestra cama prometida,
así se encoge ahora el mundo a punto de estallarme en las costillas por sorpresa, cogiendo carrerilla.
en algún momento prometo volver a abrir los ojos, terminar de corregir, y leeros a todos
5 comentarios:
Carrerilla sin zancadillas, siempre mucho mejor!
que bueno niña!
se lee la emoción...
Hasta disculpándote eres genialmente encantadora ja jaja
Besos (y descansa por Dios)
ay...esas cosquillas que se abren y se cierran...
un besito, A i r e...
Exámenes...no desaparecemos por gusto xD
Claro que a tí es fácil perdonárte la ausencia cuando llegas escribiendo cosas así...
A veces hay que coger carrerilla...
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