en tu frente anidaban canciones, luz,
sombra de crisálidas, baobabs, cambios de estación
y hogueras grises.
tenías esa hambre que no sabe de nada
y yo pan entre las manos, besos,
fuentes, gritos, trastos, primavera.
viajábamos de ti a mí y viceversa,
como excursionistas siempre primerizos
dispuestos a dejarse sorprender y amenazar
por los peligros, las victorias del otro.
viajábamos de tu frente a mis manos,
nosotros, sin ninguna prisa.
Que viaje más bonito :)
ResponderEliminarBesazos enormes
Bonito texto :)
ResponderEliminarhttp://lademenceacorps.blogspot.com
me encanta...y me han venido muchos recuerdos a la cabeza.
ResponderEliminarAY, el amor...tiempos difíciles.
Un abrazo.