sus ojos cambiaban de color si estaba triste, si era capaz de soñar, si tenía miedo o sentía deseo. sus ojos cambiaban de color. hacían señales. yo no conocía sus claves y observaba, disimulando, a la caza del momento justo de acampar en él para hacerlo sentir en casa.
Tu corazón siempre ha estado en casa ;)
ResponderEliminarBesos personita.
Te pido perdón por adelantado, pero te acabo de fusilar otro de tus precioso textos.
ResponderEliminarMás besos
Qué lindo blog! Me encanta:) Un beso, te sigo vale?:)
ResponderEliminarhttp://sorrisoincantevole.blogspot.com/
Desde lo de Dani he venido a conocerte y decidí quedarme, yo no sé hacer aviones ni barquitos de papel tampoco, y además nunca tuve un barrilete :(
ResponderEliminarte dejo un beso encantada desde mi Lente en Buenos Aires.
Qué noble propósito y qué difícil Aire.
ResponderEliminar