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24/11/08


Miraba, como un almendro desangrado sobre tierra negra, sin mover los labios. Yo quería quererla, desde su costado de ciervo, pero no había dejado de ser un animal herido.
a las

7 comentarios:

  1. hombrepez25 de noviembre de 2008, 14:30

    Y qué más "querible" que un animal herido?

    Un beso

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  2. Susanita25 de noviembre de 2008, 18:31

    me recuerda el dibu a la aceituna....

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  3. Luar27 de noviembre de 2008, 0:53

    que debilidade tengo por los animales... aun más heridos...o las heridas...
    opss me voy a la cama necesito descansar jajaja

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  4. Gabiprog5 de diciembre de 2008, 18:08

    Dificil convencer a veces de los debidos cuidados a un animal herido... Y si las heridas no son visibles... peor...

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  5. Juan9 de diciembre de 2008, 4:47

    el instinto lo llama a "auto protegerse"

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  6. Unknown17 de diciembre de 2008, 16:31

    Donde estás Wendy, ha llegado el invierno y tenemos pendiente la limpieza de primavera, este año vamos a hacer doblete!!!

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  7. despojada20 de diciembre de 2008, 3:48

    más que interesante...
    cariños

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